- Ji Yong…¿estas bien? – acariciando su rostro con preocupación
- Cla…claro que si amor – sonriendo nerviosamente – Es que me pillaste desprevenido con esa respuesta
- ¿Eso es que ya no quieres casarte conmigo? ¿Tan mal me comporté? - con un deje de tristeza
- No!! Claro que no amor!! – abrazándola a su pecho – Es solo que no esperaba que me lo pidieras, pensé que después de todo lo que pasó ya no querías casarte conmigo
- Sigo queriendo casarme contigo Ji Yong, es lo que más deseo en este momento - toma aire – Pero antes debo decirte algo…- separándose un poco de él
- ¿Qué ocurre amor? ¿Pasa algo? – la mira con preocupación y miedo en sus ojos - ¿Te sientes mal? ¿Quieres que llame al doctor?
- No tranquilo, estoy bien - fingiendo una sonrisa
- ¿Segura amor?
- Si - tiñendose sus mejillas - Es solo que quiero contarte algo y no se como decirlo...
- Mejor volvamos a la habitación y me lo cuentas allí ¿si? – esbozando una sonrisa relajada - Comienza a hacer algo de frío - tomando su manos suavemente -
- No!! Espera!! - deteniéndolo -
- Amor me asustas...¿Que es lo que pasa?
Mis nervios estaban a flor de piel, sentía como mi frente comenzaba a humedecerse. Debía pedirle perdón a Ji Yong por todo lo que pasó, realmente fui una estúpida y una cobarde por haberme comportado así. Tenía miedo a que no aceptara mis disculpas, pero de todas maneras tenía que decirle todo lo que guardaba dentro, la culpa me estaba matando lentamente. Las dos oportunidades que tuve para explicarme, las perdí, pero esta vez no sería así.
- Yo…- bajando la mirada – Quiero pedirte perdón por todo
- Pero amor no es nec…- ella lo detiene para poder continuar
- Necesito decirlo Ji, la culpa me está matando – sentándose en la arena de la playa - Cuando la boda estaba muy nerviosa porque habías desaparecido. No sabía porqué te marchaste, los chicos me contaron que aquel día en el hospital Young Bae y tu tuvisteis una pelea, pero nunca pensé que te marcharías por eso, más bien creía que era por mi más que por él…- fija su mirada en el atardecer – Con los días notaba como me iba consumiendo, nunca pensé que reaccionaría tan mal, pero después de la denuncia creció un miedo en mi a perderte, y que desaparecieras así me destrozó. Mi cuerpo de nuevo enfermó pero conseguía ocultárselo a los chicos simulando tener una simple gripe, el medico me obligó a dejar de darle pecho a Jia porque podía perjudicarla a ella. A pesar de encontrarme mal físicamente y psicológicamente guardaba la esperanza de que aparecieras el día de nuestra boda pero al ver que no llegabas a la Iglesia sentí una gran decepción. Dae intentó calmarme pero yo no le hacía caso, solo salí corriendo de allí y cuando te vi…- suspira con ojos aguados – Me enojé tanto, no entendía como podías llegar tarde a nuestro compromiso y esperar que te perdonara así como así…- fijando la vista en él – Solo actué sin pensar, mi mamá tampoco me lo impidió ni me recriminó nada, pensé que actuaba bien, pero al llegar aquí me di cuenta de mi error…- mordiendo su labio para no llorar – Todas las noches me torturaba por haber actuado tan estúpidamente, quería volver a buscarte pero mi orgullo no me lo permitía…
- Amor…- con lágrimas en sus ojos se acerca a ella e intenta abrazarla pero ella lo detiene de nuevo –
- Deja que termine por favor…- calmando su respiración para continuar – Cuando escuché tu voz aquella vez me puse tan feliz, te añoraba tanto, quería decirte cuanto sentía haberme comportado así, solo había sido una estúpida orgullosa ¿Sabes? Por un momento olvidé todo mi enojo y mi rencor al notarte tan preocupado por mí, me había decidido a regresar, me daba igual todo lo que hubiera pasado solo quería volver a estar contigo…pero Kim se me adelantó - juega nerviosamente con sus manos - luego al verte en la cueva, tan delgado y ojeroso me entró miedo, nunca imaginé verte en aquel estado y pensé que quizás todo lo que me había echo Kim era una forma de pagar por todo lo que te hice, así que no dudé en dejar que me hiciera lo que quisiera con tal de salvarte a ti…Quizás nunca me perdonarías por ello, pero prefería salvar tu vida antes que la mía, habías sufrido tanto por mí que no podía evitar sentirme culpable – escapándose algunas lágrimas - además, sabía que si me llegara a pasar algo tu cuidarías de Jia, a ella nunca le faltaría de nada teniéndote a ti a su lado, eres un gran padre y saldríais adelante sin mí...- tapa su rostro para que no la vea llorar -Lo siento Ji Yong…de verdad que lo siento, soy una idiota…
- Mi princesa…- la abraza con todas sus fuerzas
- Perdóname…- enterrando su cabeza en el pecho de él –
- Shh!! No digas nada amor, no digas nada…- besando su cabello – Sólo prométeme que nunca más te alejarás de mí, que pase lo que pase siempre estaremos unidos…- sin dejar de llorar
- Pero Ji …
- Por favor amor, prométemelo…- juntando sus frentes –
- Te lo prometo Ji Yong…
…
Apoyados en aquella barandilla plateada observábamos atentos la escena que estaba delante de nuestros ojos. No podía evitar sonreír al verlos, ahora me daba cuenta de que realmente había sido un inmaduro al intentar una vez separar a mi hyung y a mi unnie, se amaban el uno al otro y yo nunca debí interferir entre su relación. Un pequeño sentimiento de culpa punzaba mi corazón, quizás nada de esto hubiera pasado si él no hubiera cometido aquel error hace unas semanas...
- ¿Por qué te torturas? – decía Daesung sacándolo de sus pensamientos
- Mmm? – levantando su rostro para observarlo, bajándolo de nuevo para mirar con detenimiento la arena de la playa – No puedo evitarlo hyung, si no hubiera confundido el cariño con el amor nada de esto hubiera pasado, soy el culpable de esta situación
- Eso es mentira hyung – imitándolo – No puedo negar que nunca llegué a entender tu actitud, pero las cosas pasan por algo Young Bae, quizás estaba escrito que pasara esto – mirando a la feliz pareja – Quizás era necesario que pasara esto para que se dieran cuenta de lo que realmente se necesitaban el uno al otro y de lo fuerte que es el amor entre ellos…- pensativo – Como si hubiera sido una prueba por el destino para probar su relación…
- Quizás sea cierto…
- Hyung y tu ya habéis arreglado vuestras diferencias, no es necesario que te castigues más por tu error, eso solo te traerá dolores de cabeza y muchos problemas
- Nunca dejas de sorprenderme hyung – observando la cara de asombro de su compañero – Te haré caso y cerraré este capítulo – mirando de nuevo a donde estaba su hyung y su unnie – Creo que ya es hora de que deje el pasado atrás y que mire hacia el futuro, ahora vendrá una etapa difícil para Ji Yong y nuestra unnie, así que hay que estar preparados para mostrarles todo nuestro apoyo y comprensión
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