¡¡Odio los Médicos!! - Oneshot Lemon ( + 18 )

Bueno, hoy publicaré un oneshot que me han encargado, se trata de un lemon con Ji Yong. Si os soy sincera, me da mucha vergüenza subirlo :$ :$ Pero me han insistido demasiado, espero os guste y sea realista. Gracias!! Sarang Hae!!!


Well, today publish a fic that I have ordered, it is a lemon Ji Yong oppa. If I'm honest, I was too embarrassed to upload: $: $ But I have insisted too much, I hope you enjoy and be realistic. Thanks! Sarang Hae!!!

Hacía varias horas que daba vueltas en mi cama, realmente no soportaba el dolor en mi cuello. Llevaba así alrededor de una semana y el dolor no disminuía de ninguna manera. Me había puesto de todo, pomadas, hielo, métodos caseros, pero no servían…

-          ¿Unnie como sigues? – acariciando de la chica para despertarla

-          Mmm – perezosa – Me sigue doliendo Jia

-          Será mejor que vayas al médico – preocupada

-          Sabes que no me gustan los médicos – escondiendo su cabeza debajo de la almohada

-          Pero tienes que ir – insistente – ¿Y si por eso tienes que dejar de dar clases?

-          ¿Dejar de dar clases? – asoma su cabeza

-          Dime que haríamos sin ti, eres nuestra profesora, nadie puede enseñarnos las coreografías sino tú, unnie

-          Aiiisshh – se tapa con las sábanas – Esta bien, iré…

Con mucha pereza me levante de mi cama y me vestí. Jia había llamado al hospital y tenía cita a las 11 y aún eran las 10, así que tenía una hora aún. Baje a preparar el desayuno mientras mi dongsaeng arreglaba la casa, la verdad era una maravilla tenerla de compañera de piso, siempre te ayudaba en todo. Cuando termine serví el desayuno y nos sentamos a comer.

Cuando terminamos recogimos y fuimos al hospital. Agradezco que Jia me acompañe, realmente le tengo mucho miedo a los médicos, sobretodo a las malditas agujas (*le recorre un escalofrío por la espalda*)

-          ¿Qué te pasa unnie?

-          ¿Ah? – sorprendida – No nada

-          ¿En que pensabas? – dice mientras conduce

-          En lo maravilloso que son las agujas de los médicos – ironía

-          Ya unnie!! Eres mayorcita para tenerle miedo a las agujas, solo es un pequeño trozo de metal

-          Pero duele – le reprocha – Y me deja la piel morada cuando me pinchan

-          Pero eso es porque tu eres muy sensible!! Yo me hago analíticas todos los meses y no me echo a temblar cuando me pinchan

-          Ahh!! Pero eso solo fue una vez

-          Unnie – mirada fulminante – No fue una vez…

-          Ya déjalo!! – sonrojándose

 Tenía razón, habían sido varias veces las que me echaba a temblar cuando veía una aguja. Pero es que no las soporto, me dan miedo. Entramos en el hospital y nos sentamos a esperar, no pasaron muchos minutos hasta que nos llamaron.

-          Buenos Días jovencitas – dijo la doctora - ¿Cómo se encuentran?

-          Muy bien gracias – dicen ambas haciendo una reverencia

-          Me alegro – les sonríe – Decidme ¿Quién es Marnay Martínez?

-          Yo – levanta la mano vergonzosa

-          Dime Marnay ¿Qué es lo que te duele? – tomando una carpeta para apuntar

-          Mi cuello – algo tímida

-          Mmm – pensativa - ¿Desde cuando te duele? – escribiendo en su ordenador

-          Una semana – se explica – Pensamos que era porque había dormido mal, la última semana me he quedado trabajando hasta tarde, pero el dolor no disminuía. Hemos probado todos los remedios pero no servían, así que vinimos al hospital.

-          Entiendo – deja de mirar al ordenador y las mira a ambas sonrientes – Ahora vendrá un enfermero y te hará unas pruebas, quiero estar segura de que no tienes nada grave.

-          ¿E…enfermero? – asustada, mira a Jia con ojos suplicantes

-          ¡¡Ji Yong!! Ven aquí por favor – llama al enfermero

-          Si doctora ¿Me llamaba? – aparece un chico en la sala

-          Si, Ji Yong necesito que le revises el cuello a esta señorita. Quiero ver como reacciona ante las pruebas.

-          Como usted diga doctora – haciendo una reverencia

-          Muy bien, Jia tu acompáñame fuera – levantándose de la silla

-          No me dejes aquí – dice muy bajito a su amiga

-          Ya!! Ojala pudiera quedarme yo, el enfermero es realmente guapo – en el mismo tono

-          Pero es un chico, yo no quiero que me atienda un chico

-          Ya unnie!! – levantándose

-          Jia!! – alzando la voz, esconde su sonroja al ver como sonó tu tono de voz

-          Pórtate bien unnie!! – saliendo con la doctora de la habitación

¿Por qué tenía que ser un enfermero? ¿No podía ser una enfermera? No tengo nada en contra de él, pero…pero...¡¡Es un chico!!

-          Muy bien, necesito que te quites un momento la camisa – mirando la documentación que dejo la doctora

-          ¿La camisa? – ruborizada

-          Si tranquila, solo será un momento – sonriente – Yo mientras iré a buscar un par de cosas

¿La camisa? ¿Quitarme la camisa delante de él? (*se sonroja*) ¿Y ahora que hago? (*nerviosa*) A regañadientes me quite mi camiseta y tape mi torso con mis manos, nunca había sentido tanta vergüenza por mostrar mi cuerpo ante alguien, y encima era solo un enfermero.

-          Muy bien, siéntate aquí – volviendo, le señala la camilla – Dime donde te duele – tocándole con suavidad el cuello

-          ¡¡Ahh!! – dolorida

-          Lo siento – haciendo un puchero – Intentaré ser más gentil – de nuevo toca su cuello, pero esta vez la acaricia con ternura - ¿Así mejor?

-          Aja…- su voz suena como un gemido

-          Dime…¿Te duele aquí? – bajando por su espalda lentamente

-          Ahh…- suspira

Sus caricias hacían que mi cuerpo se estremeciera, claramente no sentía dolor, solo sus suaves manos acariciando mi piel. Mas sorprendida me quede cuando depositó un beso en mis hombros desnudos, haciendo que soltara un leve suspiro.

-          Ne…necesito que te quites tu falda, por favor – Sonrojado y nervioso, guarda sus manos en la bata

-          ¿La…la falda? – asustada

-          Si tranquila, es solo para hacerte unas radiografías necesito ver si tienes algún hueso dañado – notando la incomodidad de la chica – Me giraré ¿si? – dándose la vuelta

Realmente no sabía si me estaba gustando o no la situación, pero el morbo que me producía que me pidiera quedarme en ropa interior delante de él me estaba excitando demasiado (*se da cuenta de lo que esta pensando*) Yaa!! Pero que digo!! Marnay ya, no pienses en eso!!

Me aleje un poco de él y volví a la silla donde había dejado mi camiseta, dejando a su lado mi falda.

-          Y…ya…- nerviosa

-          Esta b……….

Note como su respiración se paro. Sus ojos curiosos exploraban mi cuerpo de arriba abajo y mordía sus labios, como si quisiera saborear un delicioso dulce. Por un momento su mirada se cruzó con la mía, a través de ella podía ver como sus inocentes pupilas se habían vuelto algo juguetonas al ver mi cuerpo casi desnudo.

Lentamente se fue acercando hacia mí, provocando que yo retrocediera hasta chocar con aquella mesa que antes ocupaba la doctora.

-          Auchh – se queja – Maldita mesa…

-          ¿Estas bien? – gira su cabeza y se encuentra a Ji Yong a escasos centímetros de la suya

-          S…sí – nerviosa - ¿T…todavía tiene que h…hacerme más pruebas? – inclinando su cuerpo un poco para atrás intentando aumentar esa lejanía entre ambos

-          Aja – sonriendo pícaramente – Todavía me queda que hacer una

-          ¿C…cual?

Su cuerpo se acercó lentamente al mío dejándome atrapada entre él y la mesa. Sus labios atraparon los míos en un suspiro y sus manos se posaron en mis mejillas. Sus besos comenzaron dulces, intentando que mis labios cedieran ante su petición de explorar mi cavidad, pero yo aún no reaccionaba. Cuando note su lengua humedecer mi  boca abrí los labios inconscientemente para buscar aire, pero lo único que encontré eran sus labios que devoraban los míos con lujuria.

Poco a poco cedí dejando que explorara cada parte de mí pero Ji Yong aún no tenía suficiente con mi boca. Sus labios se alejaron de los míos comenzando a dejar pequeñas marcas en la piel de mi cuello, sacándome leves gemidos cada vez que sentía su respiración agitada en mi oído. Me tomo por mi cintura y me subió en la mesa, posicionándose entre mis piernas, haciendo que el roce de su pantalón con mi ropa me arrancaran gemidos que era ahogados por sus besos.

Con una de sus manos comenzó a acariciar con dulzura mi cuerpo hasta que se posó en uno de mis pechos haciendo que mi cuerpo se arqueará de placer al recibir sus atenciones. Bajo de mi boca hasta mis senos, lamiendo y torturando uno mientras el otro lo acariciaba con su otra mano, haciendo que se pusieran erectos. Siguió bajando por mi piel hasta que…

-          Ji Yong que vas a hac………¡¡Ahhhh!!!

Nunca había tenido una sensación tan placentera como aquella. Su lengua lamía aquella pequeña parte de mi anatomía, una y otra vez, como si chupara un sabroso chupete. Me sentía húmeda, demasiado húmeda, sobretodo cuando tomo con su mano uno de mis pechos masajeándolo mientras no dejaba de lamer su preciado “chupete”.

-          Ahh…Ji Yong por favor…Ahhh – pedía entre gemidos – Ya hazlo por favor…Ahhh

-          Aún no amor – subiendo a sus labios – No quiero dañarte – introduciendo uno de sus dedos dentro de ella

-          ¡¡Ahhh!! – dolorida

-          Shhhhh – besando su rostro – Calma amor

Fue introduciendo uno a uno sus dedos, intentando que mi cuerpo se acostumbrara. Poco a poco el dolor desaparecía dejando paso a un placer indescriptible. Cada vez ansiaba más que poseyera, necesitaba sentirlo dentro de mi

-          Ya Ji Yong…Ahhh…- quitándole la camisa al chico – Por fav….¡¡Ahhhhh!! – sintiendo como la penetra – Oh dios mío…muévete…- moviendo sus caderas

-          Ahh…- aguantando las ganas de moverse - Amor no te impacientes…ahh te harás daño – sujetando sus caderas para que no se mueva – Marnay, amor, quieta por favor…

Era algo doloroso, pero cuando se comenzó a mover lentamente dentro de mí creía que desfallecería. Sus caderas subían y bajaban poco a poco, sintiendo perfectamente su movimiento dentro de mí. Viendo como los músculos de su pecho se tensaban y como pequeñas gotas de sudor recorrían su lindo torso.

-          Amor eres….Ahhhh…de…Ahhhh…deliciosa – moviendo sus caderas

-          Ji Yong…ahh…necesito más….¡¡Ahhh¡¡ - sintiendo como aumenta el ritmo – Ji…Ji Yong…Ah si…Ahh…dame más….Ahhh – aferrándose a su espalda

Necesitaba más y él me complacía. Termino por acostarme en aquella mesa y subirse encima para estar más cómodos ambos y para aumentar sus embestidas. Juraría que me quedaría sin voz, el movimiento de su cuerpo una y otra vez me traían loca, tanto que me hizo tocar el firmamento.

-          Ah…Ji Yong…Ji Yong…¡¡Ahhhhhhhh!! – nublándose su vista

-          Ahh…amor…¡¡Ahhhh!! – gruñe cuando llega al clímax

No tarde en sentir algo que se esparcía por todo mi interior arqueando mi cuerpo de placer, pero había algo que me extrañaba. Se supone que debería dejar caer su cuerpo sobre el mío, pero mantenía su peso apoyando sus brazos en la mesa. Pronto busco de nuevo mis labios, ¿Quizás quería más? No hacía falta respuesta porque comenzó a moverse de nuevo dentro de mí, pero esta vez más agresivamente. Mis gemidos se habían vuelto gritos de placer, sobretodo cuando a los minutos volvió de nuevo a llegar al orgasmo, esta vez si, dejando caer su cuerpo sudado sobre el mío.

-          Ji…Ji Yong…- intentando calmar su respiración - ¿E…estas bien?

-          Aja…- con dificultad – Pro…prométeme que vendrás más a menudo al médico

-          Así lo are…- acariciando su cabello

Una vez salió dentro de mí me ayudo a acomodarme mi ropa, al igual que yo lo hice con la de él. Cuando nos hubimos relajado un poco salimos al pasillo, no sin antes apoyarme contra la pared y dándome un beso fogoso, dejándome de nuevo sin aliento, para salir con una sonrisa pícara en sus lindos labios.

-          Unnie!! Te tardaste!! – abrazándose a ella - ¿Cómo esta mi unnie? – le pregunta Jia a Ji Yong

-          Marnay esta muuuuy bien – efusivo, se sonroja al notar su tono de voz – Solo necesita descansar y tomar las cremas estas – dándole un papelito – Pero necesito que siga pasando por aquí cada semana para ver su evolución – mordiéndose el labio

-          Si señor!! – dice divertida – Obligare a mi unnie a venir!!

-          No creo que haga falta…- dice por lo bajo

-          ¿Dijiste algo unnie?

-          ¿ah? No, no – nerviosa

-          Entonces nos vamos!! Adiós Ji Yong muchas gracias – caminando hacia la salida

(*Jia se marcha, pero Ji Yong toma por la cadera a Marnay y la atrae contra su cuerpo antes de irse, susurrándole algo al oído*)

-          Hasta pronto amor – le dice al oído antes de que se marche – Esperaré ansioso tu regreso…