martes, 6 de diciembre de 2011

Naega Michyeogayo (Me estoy volviendo loco) - Capítulo 30


Caminamos por una cueva oscura iluminada por unas pequeñas antorchas. Había poca visibilidad en aquel lugar, en varias ocasiones tuve que pedirle que me esperara porque apenas veía el camino. Por un momento aquella chica desapareció, la llamaba y la llamaba pero no respondía. Tenía miedo a perderme y a poner en peligro la vida de mi prometida, pero no sabía que hacer. Mis pies comenzaron a caminar, miraba hacia atrás con miedo ¿y si era una trampa?

-          Ji…- se escuchaba una voz a lo lejos
-          ¡¡Amor!! ¡¡Amor donde estás!! – intentando seguir su voz
-          Estoy aquí…- con voz apagada
-          ¡¡Amor sigue hablando por favor!! – caminando rápidamente
-          Ji…ayúdame…

Mi corazón latía rápidamente. Era igual que en aquella pesadilla, la misma situación, las mismas palabras. No sabía a donde demonios iba, su voz se escucha cada vez más apagada y me costaba encontrar el camino correcto. La sentía más cerca, lo podía notar, pero no la veía. Aquel lugar era un completo laberinto. De pronto se escuchó un grito, su linda voz desgarrada. Mis pupilas se llenaron de lágrimas, la impotencia recorría mi cuerpo. Mi corazón pedía a gritos que no le hicieran nada, rezaba por que este estúpido no la tocara.

-          ¡¡Amor!! – viéndola a lo lejos
-          Mmm…- levantando la vista con dificultad – Ji eres tú…
-          Amor, amor, amor – llegando a su lado - ¿Qué te han hecho? – sosteniendo su rostro y besándolo
-          Ji has venido…- intentando sonreír
-          Te dije que te encontraría amor – sin parar de llorar – Estas herida…- mirando las numerosas cortadas que tenía en su rostro al igual que los morados de sus piernas y brazos – Me dijiste que no te había tocado amor, ¿Por qué me mentiste?
-          No quería preocuparte…- bajando la cabeza – Lo siento…
-          No amor, por favor no te pongas así – levantando su rostro – Lo siento, no debía decir eso, déjame soltarte – deshaciendo los nudos que la sujetaban
-          No siento mis brazos…- dejándolos caer al suelo
-          Amor…- sujetándola – Ven aquí…- apoyándola contra su pecho – Te amo…- abrazándose fuertemente a su cuerpo – Te eche de menos… - escondiendo su cabeza en el cuello de la chica
-          Y yo a ti Ji…- recibiendo su abrazo – Pensé que no me vendrías a buscar…
-          ¿Por qué dices eso? – sorprendido
-          Me porté mal Ji, no debí haberte tratado así el día de nuestra boda, pero estaba muy enojada…- suspira – Lo siento…- escapándose una lágrima por sus orbes – Pensé que no me buscarías porque te habías enojado conmigo y ya no me querías…- con voz triste
-          No digas eso amor, nunca te he dejado de amar y te iría a buscar al infierno si hiciera falta – sonriéndole – Haría cualquier cosa por ti…- dándole un tierno beso en los labios
-          ¡¡Ohh!! ¡¡Que romántico!!  – apareciendo Kim - ¡¡Voy a llorar!! – dice irónicamente
-          Ya estoy aquí, deja que se vaya ella – aún abrazado a su prometida
-          Muy bien, Seoh Ah llévatela
-          Si Kim…- acercándose a ellos y ayudando a levantar a la chica – Ven conmigo…
-          Ji…- negándose a separarse de él
-          Tranquila amor – dándole un último beso – Estaré bien…
-          Vamos…- dice Seoh Ah tirando de ella


No quería marcharme, no quería. Él estaba tan asustado como yo, lo sabía. Lo podía ver en sus ojos, pero él lo negaba como siempre, todo por hacerme sentir bien. Me sentía afortunada, había elegido a la persona correcta. Pero tenía miedo a perderlo ¿Qué debía hacer?

-          Ha venido acompañado…- le dice muy bajo mientras salen fuera de la cueva
-          ¿Ah? – con voz débil
-          Ji Yong vino con la policía y sus amigos – le repite – Debes alertarlos, no se de que es capaz Kim – perdiendo su sonrisa
-          Pero si voy a buscarlos tardaría mucho…
-          Intentaré retenerlo el mayor tiempo posible – le da un móvil – Llámalos y encuéntrate con ellos, yo te esperaré aquí
-          Gracias Seoh Ah…- tomando el móvil – Eres una buena persona…- dándole un abrazo
-          No lo soy…- triste – Anda vete…
-          Gracias de nuevo – echando a caminar

Tomé el celular y marqué el móvil de Tae pero no contestó. Hice lo mismo con el de Dae y el de oppa TOP, todos aparecían incomunicados. Sólo quedaba Seung Ri, él era mi única esperanza…

-          ¿Si? – responde dormido
-          ¿Oppa?
-          Lo siento oppa Seung Ri esta ocupado, los autógrafos después – adormilado
-          ¿Ah? Seung Ri despierta de una vez, soy la prometida de Ji Yong – algo enojada
-          ¡¡Oh!! – despertándose de golpe - ¿Unnie eres tú? – alguien le arrebata el móvil - ¿Unnie eres tú? ¿Estas bien?
-          Hola Dae si tranquilo, pero necesito vuestra ayuda, Ji Yong está en peligro
-          ¡¿Qué?! Pero eso es imposible el estaba en su habitac…..Maldición se escapó – mirando que la habitación estaba vacía
-          Hizo un intercambio con Kim, él por mí
-          ¡¿Qué?! Está loco, lo matará – alzando la voz - ¿Unnie donde estas?
-          Estoy en las cabañas de la playa
-          Muy bien, no te muevas, llamaré a el inspector e iremos a ayudarte
-          ¡¡Dae!! – antes de que corte – Apúrate por favor…
-          Lo haré unnie – cortando la llamada


-          Cuanto tiempo Ji Yong – sonriente – Qué cambiado
-          Déjate de rodeos, ¿Qué es lo que quieres? – enojado
-          Qué maleducado por favor, tu mamá debería haberte enseñado modales – riendo
-          No metas a mi mamá en esto
-          Muy bien, muy bien – sentándose en una silla – ¿Aún te atreves a preguntarme que quiero? ¿No te quedo claro?
-          No
-          ¡¡Oh!! ¡¡Y yo que pensaba que sí!! Eso es que no vistes las marcas que tenía tu novia – riendo – Por cierto, sabe delicioso
-          ¡¡Cómo te atreves a tocarla!! – golpeándole
-          Jajaja El dragoncito se cabreo – recomponiéndose - ¿Por qué te enojas? No te miento “oppa”, sabe muy rico además tiene un cuerpo precioso – esquivando el golpe de Ji Yong – Tranquilo jajaja No he dicho que no supieras ya – recibiendo un puñetazo – Muy bien Ji Yong, hablemos con los puños – pegándole en la cara
-          ¡¡Ahhh!! – cayendo al suelo
-          ¡¡Oh, te dañé!! ¡¡Lo siento!! – sarcástico - ¡¡Pelea estúpido!!
-          Te mataré…- secando la sangre que salía de su labio herido
-          Inténtalo – decía Kim desafiante


No hay comentarios:

Publicar un comentario