lunes, 14 de noviembre de 2011

Naega Michyeogayo (Me estoy volviendo loco) - Capítulo 21




Salí de allí corriendo. Las lágrimas nublaban mi vista y mis pies estaban cansados, llevaba alrededor de 2 horas vagando por las calles. No sabía que hacer o que decir, solo huía de aquello que me atormentaba. Tantos años de amistad tirados por la borda por un estúpido ataque de celos. Tome un taxi y le di aquella dirección que tanto me sabía de memoria.

Todo seguía igual, nada había cambiado. Los autos seguían donde mismo, los abetos y los gnomos del jardín igual. Ahora era mi único refugio…

- ¿Si? ¿Quién es? – pregunta por el portero automático
- Omma…- dice entre sollozos
- ¿Ji Yong? ¿Ji Yong eres tú cielo?
- Sí...- seca sus lágrimas - ¿Puedo entrar?
- Claro que sí mi cielo – abriendo la verja

Salió a mi encuentro. Tan bonita como siempre (*suspira*) Cuanto la echaba de menos…

- Omma…- abrazándose a ella y rompiendo a llorar
- Mi Ji Yong – correspondiendo su abrazo – Ya mi cielo…- acariciando su cabello
- Omma…omma… - entre lágrimas
- Shhh calma cielito, vamos dentro, te preparé algo calentito para que te relajes – tomando la mano de su hijo y llevándolo dentro de la casa
- ¡¡Hermanito!! – corre a abrazarlo - ¿Qué te pasa? – preocupada
- Hola Dami…- dejando que lo abrasen – Nada…- con voz apagada
- Se que te pasa algo - lo mira extrañada - Ven conmigo – lo lleva al salón de la casa y se sientan ambos,mientras su mamá va a la cocina - ¿Te has peleado con tu novia?
- No, claro que no Dami – negando- El problema no es con ella, es con Young Bae
- ¿Young Bae? ¿Qué ha pasado? – asustada 
- Pues...- intenta explicarse
- Ya Dami, no molestes a tu hermano – llegando su mama con una bandeja en las manos – Acaba de llegar, debe estar cansado – se sienta al lado de su hijo y acaricia su rostro – Come algo, dúchate y acuéstate cielo ¿si? – sonriente – Mañana hablaremos
- Gracias omma…- abrazándose de nuevo a ella – Te quiero…
- Y yo a ti cielo, y yo a ti…



Daba vueltas alrededor de su habitación como una fiera enjaulada. Su rostro estaba rojo de tanto llorar y sus palabras eran leves susurros que apenas se entendían. Ji Yong había entrado a hablar con nuestro hyung y luego salió corriendo sin avisar a donde iba. 

Me mantenía sentado en su cama mientras mecía a Jia para que durmiera, su mamá estaba demasiado nerviosa como para tomarla en brazos. La criatura notaba su inquietud y la falta de su papá, dormía pero se despertaba llorando, ella también estaba asustada.

- Ya unnie, calma…- decía Seung Ri – Seguro que estará bien… - acariciando la carita de la niña
- Pero no contesta a mis llamadas ni a mis mensajes oppa, nadie sabe de él, como quieres que me calme – alterándose - ¿Y si se hizo daño? ¿Y si se perdió? 
- Unnie no dramatices, mejor duérmete – calmándola – Seguro que mi hyung aparecerá mañana con su sonrisa tonta en su cara, ya verás – intentando ser divertido – Ahora descansa, ambas lo necesitáis…- viendo como la chica se acuesta en la cama
- Oppa…- lo llama
- ¿Si unnie? – acostando a Jia al lado de su mamá 
- ¿Puedes dormir con nosotras esta noche? – suplicante
- Claro que sí – acostándose también


(*A la mañana siguiente*)

No había podido dormir en toda la noche. Daba vueltas y vueltas entre las sábanas de la cama, todo se hacía extraño para mí. Aquel cuarto que tanto significado guardaba para mí había perdido su magia. Me sentía raro sin escuchar el llanto de Jia o su dulce voz despertándome al amanecer (*abre los ojos*) Sólo habían pasado unas horas y ya las echaba de menos…

Me gire y miré mi reloj, eran cerca de las 10 de la mañana. Al lado del despertador reposaba mi celular, lo tome entre mis manos y lo mire. Tenía muchas llamadas perdidas de los chicos y cientos de mensajes de mi novia preocupada (*suspira*) Sólo espero que no me vengan a buscar…

- Ya veo que te levantaste 
- ¿Ah? – asustado - ¿Dami? ¿Qué haces aquí? – sentándose en la cama
- Me quede preocupada por ti hermanito, así que pase la noche cuidando tu sueño – apoya su cabecita en sus rodillas 
- ¿No has dormido? – se levanta de la cama y se pone su camiseta
- No - niega - ¿Pero que ha pasado hermanito? En tus sueños repetías una y otra vez el nombre de Young Bae ¿Acaso se pelearon?
- No…- sentándose en la cama
- ¿Seguro? – levanta una ceja – Entonces porque hay en el teléfono varios mensajes de tus hyungs y de tu novia preocupados por ti diciendo que ayer saliste corriendo del hospital después de haber visto a Young Bae
- Yo…- suspira – Es una historia muy larga Dami…
- Cuéntame por favor – sentándose a su lado – Confía en mi hermanito – sonriente – Te ayudaré en todo lo posible…


No hay comentarios:

Publicar un comentario